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El volumen editado por S. Benoist (B.) es parte de un programa colectivo de investigación sobre los aspectos concretos de la damnatio / abolitio memoriae en la antigüedad romana. Los 18 estudios reunidos abordan aspectos diversos, apuntando sobre todo al lector especializado, y con especial nfasis en las fuentes epigráficas: los orígenes republicanos del procedimiento de condena de los hostes publici, las intervenciones en el espacio urbano, jurídicas o espontáneas, y la continuación de tales prácticas durante el Imperio cristiano y en el seno de la iglesia. El período estudiado se extiende desde los dos últimos siglos de la República hasta comienzos de la Edad Media. Las exposiciones son acompañadas generalmente por un detallado aparato de fuentes, ilustraciones y esquemas.
En la introducción al volumen, B. se refiere al carácter conmemorativo de la Roma antigua, sociedad urbana de dimensiones imperiales para la que “le passé structure le présent au moyen du souvenir des actes glorieux des ancêtres, d’une forme de réactualisation périodique de l’histoire commune, par le rituel et l’action politique … Chaque individu à sa place se trouve également invité à porter attention aux ancêtres, à célebrer ainsi un mos maiorum incarné” (p. ix). En esta sociedad, cuyo eje es la veneración y reactualización del pasado, existe también un rechazo de la memoria de ciertos individuos, que se traduce en un olvido voluntario a partir de decisiones jurídicas e inclusive en intervenciones directas sobre los monumenta conmemorativos. Particularmente en la época imperial, Roma desarrolla verdaderas estrategias coordinadas de sanciones y reescritura del pasado común, que, de acuerdo a las fuentes sobrevivientes, encuentran su primera formulación al fin del período republicano, conformando “une véritable culture de la mémoire et de sa présence sous diverses formes dans l’espace urbain” (p.x).
Asimismo, B. señala tanto la afinidad de los trabajos reunidos con la obra de Harriet Flower1 como el período más extenso (desde el Egipto de los faraones a los días de Gregorio el grande) y los ejemplos complementarios comprendidos por el presente volumen. Por otra parte, a tan diversas modalidades de condena de la memoria corresponde un espectro más amplio, tanto geográficamente (Roma e Italia, las provincias occidentales, Macedonia, Egipto y el Oriente próximo) como en lo relativo a las fuentes ( papyri egipcios, inscripciones de las iglesias orientales del siglo VI, epigrafía, códigos legislativos y actas conciliares cristianas, Cicerón y San Agustín).
El volumen está dividido en cuatro partes que atienden a lo que B. considera “une histoire des usages de la mémoire” (p.xii). En 1. Aux origines d’une procédure. Approche plurielle de la condamnation de la mémoire, se analizan los orígenes del procedimiento de condena de la memoria, la romanización jurídica de formas de damnatio memoriae (DM) preexistentes, así como la consolidación de dicha práctica durante la transición de la República al Principado. En este sentido, en el capítulo 2, “La DM a-t-elle des origines républicaines? Les procédures de condamnation politique des Gracques aux proscriptions de Sylla”, M. Bats estudia el proceso evolutivo de constitución y codificación de la DM a partir de la violencia civil iniciada con las reformas de los Graco y las proscripciones de Sila. La dificultad para la interpretación del período 133-80 a.C. reside en el carácter tardío (inicios del Principado) de las fuentes, y en su cercanía temporal con la DM de Marco Antonio y Pisón. Según Bats, la elaboración jurídica de la DM no intervino más que en un segundo momento, como codificación de prácticas ya en vigor: “De tout temps, le salud de l’État a justifié le recours à ces procédures judiciaires qui ne sont pas spécifiques de la DM.” (p. 37). La ausencia de todo procedimiento jurídico establecido explica la ambigüedad de las fuentes, especialmente Cicerón, respecto del “crimen” de Tiberio Graco ( affectatio regni, parricidium patriae) y la suerte corrida por Escipión Nasica, que en su calidad de sumo pontífice atacó a un magistrado público protegido por su status, recurso a la violencia privada en la esfera pblica. Diferente resultó el proceso que condujo a la eliminación de Cayo Graco y sus partidarios: en 121 a.C., un senatusconsultum ultimum de re publica defendenda confirió al cónsul Lucio Ópimo un imperium domi militiaeque ilimitado y poderes judiciales que suprimieron toda garantía constitucional. Aunque en las fuentes no aparezca el concepto de hostis publicus ni el senatusconsultum ultimum cite nominalmente a Cayo Graco y sus partidarios, “L’état d’urgence, en suspendant touts les droits du citoyen, autorise l’elimination, sans procès, de toute personne qui s’oppose au retour à l’ordre et au salut de la République: tout citoyen rebelle est dès lors considéré comme ayant perdu sa qualité de citoyen et ne peut plus bénéficier de la provocatio ad populum.” (pp. 29-30) En la evolución constitutiva de la DM, el senatusconsultum de 100 a.C. dispuesto contra Saturnino y Glaucia continúa las medidas de 121, y en 88, con Sila, se agrega un elemento crucial: la declaración de hostes publici contra los partidarios de Mario, condenados a la muerte inmediata y a la confiscación de sus bienes. Según Bats, durante la República no se impuso la eliminación de los nombres de los adversarios, pero en todo caso se verificó una creciente apropiación, por parte de las autoridades públicas, de espacios reservados a la esfera privada y familiar. En cambio, durante el Principado, las sanciones post mortem incluyeron la confiscación de los bienes y la supresión completa del nombre, de la familia, de los allegados y amigos del condenado. Bats concluye que, partiendo de la noción de hostis publicus de la época de Sila, la práctica de la oblitio memoriae pudo prescindir, durante el Principado, de las proscripciones, del senatusconsultum ultimum y del estado de guerra que éste instauraba, pues toda decisión recayó en el imperium del princeps.
En el captulo 3, “Le sort des partisans d’Antoine: DM ou clementia”, M.C. Ferriès analiza la suerte corrida por los partidarios de Marco Antonio después de la derrota de Actium. La DM de Marco Antonio fue dispuesta por un senatusconsultum ultimum del 31 o 30 a.C. Respecto del destino de sus aliados, dos tradiciones perviven: una, derivada de Res Gestae, afirma que unos pocos enemigos fueron castigados; otra, que se encuentra en Dión, según la cual la pena de muerte y los castigos se extendieron a la mayoría de los partidarios de Antonio. Sin embargo, la ausencia casi total de datos sobre los supuestos condenados lleva a Ferriès a concluir que “Le sort des antoniens fut donc extrêmement variable. Pour la majorité d’entre eux il subsiste un mystère… C’est plutôt d’un refus de leur mémoire qu’il faut parler. Le phénomène de disparition est éclipsé par la conversión spectaculaire de quelques adversaires de la veille.” (pp. 57-58).
La segunda parte, Vers un modèle imperial de l’effacement de la mémoire dans l’espace urbain?, incluye cuatro capítulos que, a partir de fuentes epigráficas, papirológicas y monumentos urbanos, estudian el diseño de un modelo imperial de supresión de la memoria en el espacio de las ciudades. Se prioriza el siglo III d.C., que, desde los Severos a Constantino, condujo a los enfrentamientos entre paganos y cristianos durante los últimos años del siglo IV. Destacamos el capítulo 6, “Propaganda or pragmatism? DM in the third-century papyri and imperial representation” de J. de Jong, que atiende especialmente a las medidas de DM sufridas por los emperadores, específicamente en papiros (sólo atestiguadas a partir del siglo III d.C.), y a las implicaciones de tal práctica para la representación y percepción del poder imperial romano en Egipto. Puesto que la titulatura imperial servía para la datación de un documento, no es infrecuente la aparición de los nombres de emperadores romanos en papiros egipcios. Pero, por otra parte, resultan interesantes como medio propagandístico los elementos que, en la titulatura, enfatizan las características religiosas, militares y dinásticas que legitiman la posición de poder del emperador. Así, el nombre personal de Augusto, Imperator Caesar Augustus, que consistía de un elemento militar ( Imperator), uno dinástico ( Caesar) y otro religioso ( Augustus), se convirtió en la designación habitual del emperador. A partir del siglo III d.C. aparece en los papiros otro medio de legitimación del poder imperial, la DM, fenómeno interesante en la medida que los papiros eran destinados mayormente a usos privados. La eliminación del nombre del emperador o parte de la titulatura no era llevada a cabo consistentemente, lo que sugiere que no exista un principio general subyacente sobre la supresión del nombre: el significado simbólico de la supresión es el aspecto más importante de la DM en los papiros. Según de Jong, la localización cronológica acotada sugiere que en Egipto la DM ocupó un lugar relevante en la representación imperial, tal vez por la mayor romanización, y en todo caso se trataba de un acto práctico y simbólico, no sistemático: “In this respect papyrological damnation says more about the top of society than of its lower layers: it tells what the top wanted. … Papyrological damnation can be informative on how a dead emperor was perceived by his survivor and how this dead predecessor could be used in the successor’s power legitimation by disconnecting himself from the condemned.” (pp. 110-111) Aporte significativo adicional lo constituye la bibliografía aportada por de Jong (n.2, p. 96) sobre el problema de la terminología, considerando que DM no es un concepto aplicado en la antigüedad (igualmente útil resulta el análisis y bibliografía sobre la noción de DM aportado por A. Daguet-Gagey en el capítulo 7, “La DM dans l’espace urbain: les avatars de quelques monuments romains”, especialmente pp. 113-116).
La tercera parte, Les enseignements d’une topographie exemplaire de la mémoire incluye 5 capítulos vinculados a la topografía y epigrafía de la DM, abarcando geografías y aspectos muy diversos, que evidencian no sólo la aplicación más o menos sistemática de los procedimientos de DM, sino también, a lo largo del tiempo y en toda el área de influencia romana, una atención escrupulosa y sostenida al diseño y control de la memoria. Destacamos en esta sección el aporte de M. Kaniréa, capítulo 11, “Statues de culte et DM: l’exemple du Métrôon à Olympie”. El grupo escultórico del Metrón de Olimpia devino una domus Augusta, templo del culto de las dinastías Julio-Claudiana y Flavia, después de su consagración a Augusto: “La nouvelle dédicace de cet édifice au fondateur du Principal est un example des plus caractéristiques de la transformation de l’espace sacré grec au début de l’Empire … et traduit sur le plan édilitaire la manière dont le nouveau pouvoir Romain put s’imposer progressivement sur les symboles du passé.” (pp. 181-182). La identificación de siete estatuas imperiales y su disposición en la cella del edificio revelan la variedad de significados que la DM podía tener en un contexto cultual: a excepción de la imagen de Augusto, asimilada a Zeus, que permaneció estable, la composición del grupo parece haber sufrido cambios constantes durante el siglo I d.C., de acuerdo con las necesidades ideológicas dinásticas particulares y la conveniencia de integrar al fundador del Imperio y sus herederos en el espacio sagrado y el contexto iconográfico del santuario olímpico. Sin embargo, algunas de estas estatuas han sido despojadas de sus cabezas, otras (las correspondientes a Tiberio y Nerón) han desaparecido del conjunto. Para Kaniréa, tales desplazamientos y desaparición de una efigie o monumentum, en un contexto cultual, tienen un significado especial: “Toutefois, la DM dans le contexte du culte impérial pouvait prendre una autre signification: elle équivalait a la désacralisation de la personne frappée et, dans ce cas, elle touchait directement à sa postérité.” (p. 193) Un fenómeno similar es estudiado por J.Arce, capítulo 8, “DM sur l’arc de Constantin à Rome”: la desaparición de la cabeza de seis relieves que representan al emperador Constantino.
Por último, la cuarta parte, Les aléas de la mémoire durant l’Empire chrétien, aborda el estudio de la continuidad de prácticas relativas a la DM en el contexto de los enfrentamientos cristiano-paganos entre los siglos IV y VI d.C. Dicha continuidad, sin embargo, debe ser matizada: aunque cismas y herejías son objeto de persecución, las prácticas de abolición de la memoria son más limitadas y conviven con formas de restitutio. Asimismo, la Iglesia practica formas de exclusión específicas que evidencian las crisis sucesivas de la extensión de su poder. Parece necesario recordar, en relación con esta última parte, las palabras de B. en la introducción: “Il convien alors, tout en évitant tout comparatisme forcé et quête vaine des permanences, d’être sensible aux prolongements tardifs d’une même attention a la memoria.” (p. xiii). Algunos de los temas abordados en esta sección son: el problema de la imposición de la ortodoxia cristiana durante la persecución del donatismo, durante los siglos IV y V, el silenciamiento de los eunomianos en el Codex Theodosianus y la cuestión de los obispos heréticos de Nápoles, partidarios del arrianismo durante los siglos IV a VI, con posterioridad a la condena del concilio de Nicea del 325.
Mémoire et histoire significa un aporte positivo y enriquecedor a los estudios sobre la dinámica de la memoria en la sociedad romana durante un extenso período, y sugiere afinidades entre algunos aspectos de los fenómenos antiguos y los modos en que la sociedad moderna maneja ciertos legados políticos y sociales (véase especialmente la conclusión, “Les usages de la memoria à Rome, de la Respublica à l’Empire chrétien”). La variedad de los aportes, la amplitud de las prácticas, espacios y períodos estudiados, no ha redundado en un conjunto discordante, sino en un volumen homogéneo a la vez que diverso. Por momentos excesivamente especializado, el volumen representa, no obstante, una contribución importante y específica a la más acotada e interpretativa obra de H. Flower. De la lectura de todos los estudios se puede inferir una conclusión doble: la permanencia en el mundo romano de formas de conmemoración colectiva de los individuos y de su condena eventual, y la imposibilidad de una definición global del fenómeno de la DM. Tal vez hubiera resultado adecuado un capítulo que, siquiera de modo general, aportara un análisis de la importancia de la memoria y el olvido en los textos literarios e historiográficos romanos.
La evolución de prácticas similares desde el período republicano condujo a la formación de una ideología imperial que establecía la consecratio o la DM como alternativas posibles para los romanos. Esta ideología, por otra parte, halló continuidad, aunque matizada, en los procesos de extensión del poder de la iglesia cristiana durante sus primeros siglos de existencia. La complejidad evolutiva de las prácticas de conmemoración y olvido entre los romanos nos lleva a considerar que ningún monumentum poseía un status religioso o político definitivo o intangible.
Index locorum, index nominum, index rerum, resúmenes bilingües y un índice general completan el volumen.
AUTORES Y TÍTULOS
Avant-propos
Liste des contributeurs
Introduction
I. Aux origines d’une procedure. Approche plurielle de la condemnation de la mémoire
1. Didier Devauchelle: Effacement des noms de personnes et martelages dans les textes égyptiens d’époque romaine.
2. Maria Bats: La damnatio memoriae a-t-elle des origines républicaines? Les procédures de condamnation politique des Gracques aux proscriptions de Sylla.
3. Marie-Claire Feries: Le sort des partisans d’Antoine: damnatio memoriae ou clementia?
4. Alain Martin, La condemnation de la mémoire de Domitien: état de la question.
II. Vers un modéle impérial de l’effacement de la mémorie dans l’espace urbain?
5. Stéphane Benoist: Martelage et espaces urbains entre public et privé. Remarques sur quelques exemples tires des provinces occidentals (Bretagnes, Gaules et Germanies)
6. Janneke de Jong: Propaganda or pragmatism? Damnatio memoriae in the third-century papyri and imperial representation
7. Anne Daguet-Gagey: La damnatio memoriae dans l’espace urbain: les avatars de quelques monuments romains
8. Javier Arce: Damnatio memoriae sur l’arc de Constantin à Rome
III. Les enseignements d’une topographie exemplaire de la mémoire.
9. Michel Sève: Le destin des honneurs pour les empererus et les notables à Philippes. Note d’epigraphie et de topographie
10. Christien Höet van Cauwenberghe: La fin des princes hellénistiques en Achäie romaine aux 1er siècles après J.C.
11. Maria Kantiréa: Statues de culte et damnatio memoriae: l’exemple du Métrôon à Olympie
12. Sabine Lefebvre: Condamantion de la mémoire et espace civique: pour une pédagogie du martelage en Afrique
13. Rudolf Haensch: Damnatio et recordatio nominis dans les inscriptions des églises de l’Antiquité tardive
IV. Les aléas de la mémoire durant l’Empire chrétien
14. Carles Buenacasa Pérez: La persécution du donatisme et l’imposition de l’orthodoxie en Afrique du Nord (IV – V siècles): comment effacer la mémoire des hérétiques?
15. María Victoria Escribano Paño: La condamantion au silence des eunomiens dans les lois du livre XVI du Code Théodosien (C.Th., 16, 5, 34 en 398)
16. Hélène Ménard: La mémoire et sa condamnation d’après les codes tardifs: l’exemple de la révolte d’Héraclien en 413 après J.C.
17. Janine Desmulliez: Les évêques hérétiques de Naples.
18. Karine Merlin: Maximianus de Syracuse, venerandae memoriae
CONCLUSION
Stéphane Benoist, Les usages de la memoria à Rome, de la Respublica à l’Empir chrétien.
RÉSUMÉS BILINGUES DES CONTRIBUTIONS
INDICES
I. Index locorum
II. Index nominum
III. Index rerum.
Notes
1. The Art of Forgetting: Disgrace and Oblivion in Roman Political Culture, Chapel Hill, NC: The University of North Carolina Press, 2006.